jueves, 24 de noviembre de 2011

Milagro de Crescencia.


Virtudes de la Hermana Crescencia



AMOR A DIOS
Porque rezaba mucho, se veía que amaba mucho a Dios.
PIEDAD
Hacía todas las cosas teniendo en cuenta como agradar a Dios.
ESPIRITU DE SACRIFICIO
Nos enseñaba a ofrecer todos nuestros sufrimientos al Señor.
ESPIRITU DE REPARACION
Ofrecía los sufrimientos en reparación de los pecados del mundo.
RECOGIMIENTO
Siempre estaba pendiente del altar.
DESPRENDIMIENTO
No poseía ningún recuerdo, nada de nada. Sólo lo necesario.
OBEDIENCIA
Cumplía las disposiciones dadas basándose en la Santa Obediencia, es la Voluntad de Dios.
UNION CON DIOS
Por medio de las jaculatorias aprendidas en el noviciado.
CARIDAD
Nunca faltó a la caridad. Nunca trató mal a nadie.
DILIGENCIA
La ponía en todo lo que hacía.
PACIENCIA
Nunca se impacientaba. Era toda calma.
FERVOR
Todo lo que hacía le salía del corazón.
HUMILDAD
Nunca buscó el primer lugar.
SENCILLEZ
Solamente realizaba las tareas normales de una religiosa.
ALEGRIA
Su alegría iba unida a la gran responsabilidad con que cumplía sus deberes.
CONSTANCIA
Practicaba las virtudes cristianas en profundidad y con perseverancia infatigable.
ORDEN
Quería que todo estuviera listo para trabajar.
APOSTOL DE LA ORACION
Quería que todos rezáramos por la conversión de los pecadores.
DEVOCION A MARIA
Era un alma profundamente mariana. Quería a la Virge
n.

Sus padres.

 Doña Ema Rodriguez de Pérez madre de la Hna. Crescencia, falleció el 6 de enero de 1950
Agustín Pérez, padre de la Hna. Crescencia

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Una enseñanza de vida

Así como Jesús entregó la vida por nosotros, aquí un hombre nos deja una enseñannza muy importante de vida, dar la vida por personas que no saben valorar lo que Dios les dió y lo que hace por nosotros.

martes, 15 de noviembre de 2011

Su vida

Documental Agentino sobre la hermana Crescencia por las alumnas del Colegio del Huerto en Pergamino.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Un lugar para el encuentro con Jesus, su Madre y la Hermana Crescencia

 Capilla de nuestro colegio.
Altar e imagen de la Virgen del Huerto.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Nuevamente con nosotros.

Testimonios de chicas de la promoción 2007. La imagen de la Hermana Crescencia en color violeta

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Hermana Crescencia entre TODAS

 Rincon de Maria Crescencia en el Colegio Nuestra Señora del Huerto Salta
Mural de Maria Crescencia hecho por chicas del primer año del año 2008

martes, 8 de noviembre de 2011

Vida y Obra de la Hermana Crescencia Perez. VIDEO

Historia y Canto de la Hermana Crescencia


A 77 años de la muerte de la hermana Crescencia, crecen la fe y la devoción por la Venerable. (Diario La Opinión, 3/4/2010)

El padre Carlos Pérez, sobrino directo de la Sierva de Dios, recuerda cómo fue aquel viaje a Quillota, Chile, en busca de los restos de “la santita”. Confesó que mientras se trasladaba, en el auto sintió aroma a violetas. “En la vida de Crescencia no hubo nada extraordinario, todo lo hizo con sencillez y amor a Dios, y eso fue lo grande de su vida”, dijo el sacerdote. Asegura que fue precursora del acontecimiento de la Virgen del Rosario de San Nicolás.

DE LA REDACCION. Cuando la hermana María Crescencia Pérez muriera en olor de santidad, en 1932, comenzaron los trámites para repatriar sus restos desde Chile. Para ello tomaron la iniciativa sus familiares, sin encontrar oposición por parte del instituto donde se hallaba el cuerpo incorrupto, ya que pareció lógica la repatriación de quien sólo circunstancialmente se había demorado en Chile cumpliendo la obediencia.
Abrió el camino el padre Carlos Antonio Pérez, sobrino directo de la sierva de Dios, quien asumía la representación para solicitar que los restos de Crescencia se conservasen en el panteón de las Hermanas del Huerto de Pergamino.

Testimonio del padre Pérez
 “En 1966, cuando yo era párroco de la Parroquia Nuestra Señora de Luján (en Pergamino), papá recibió la noticia de que María Crescencia había sido encontrada incorrupta, lo cual llamó mucho la atención. Ese fue un paso importante en orden a mantener viva la memoria de Crescencia mientras no llegase el momento del proceso de beatificación”, narró el padre Carlos Pérez.
Entonces un día nos preguntamos con un grupo de amigos y familiares cómo estaría ese cuerpo incorrupto. Hablamos con la madre general de las Hermanas del Huerto, a quien le pareció bien ver el estado de conservación del cuerpo en Chile.
“Así que tres amigos salimos en auto hacia a Chile, y en el camino dentro del automóvil se sintió la fragancia a violetas, tanto a la ida como a la vuelta. En ese momento recordé que antes de que Crescencia falleciera, en Chile, la llevaron a un hospital de Vallenar. Allí le dijo a la superiora que cuando muriera le iba a avisar de alguna manera: y ése fue el aviso, en Quillota sintieron el aroma de violetas de una manera muy intensa y durante muchos días cuando ella murió. Por eso, cuando sentimos el aroma a violetas en el auto pensamos que algo estaba anunciándose”.
-¿Se conmovió cuando se produjo ese extraño hecho?
-Sentí una profunda conmoción porque advertí que se estaban anunciando cosas futuras que no conocía, entonces lo viví como algo impactante. No es un simple aroma que uno siente, yo lo ligaba a la muerte y a la gloria futura de Crescencia.
-¿Ese fue el primer viaje que realizaron a Chile?
-Sí, después realizamos dos más. En el primero constatamos que el cuerpo estaba con signos de incorruptibilidad: lo que más llamó la atención fue el globo izquierdo del ojo que estaba entero, después le levantaron la mano, la bajaron y no se quebró.
En el segundo viaje fuimos a recoger testimonios de la gente que la conocía. Y en octubre del año 1983 se decidió traerla a Pergamino; la familia hizo el pedido y la Congregación de las Hermanas del Huerto no tuvo problemas.
-Debido al clima de Quillota algunos cuerpos se encontraron momificados pero no incorruptos, ¿esto es así?
-Claro, la diferencia es que el cuerpo momificado es una piedra que se quiebra, en cambio el cuerpo era flexible. Incluso en el mismo panteón era la última de nueve hermanas fallecidas, por lo tanto el ataúd estaba debajo de todos. Los otros restos tenían los huesos expuestos y ella estaba incorrupta, por lo tanto en este caso el clima actuó para todos igual.
-Y luego de que el cuerpo de Crescencia llegara a Pergamino se produjo el acontecimiento mariano en San Nicolás…
-Sí, al poco tiempo de traer el cuerpo de María Crescencia al país comienza el acontecimiento de la Virgen del Rosario de San Nicolás, por eso siempre digo que Crescencia fue precursora del acontecimiento de la Virgen porque inició un año antes su gestación pública y es como que preparó los ánimos para algún hecho de gracia que se pudiera producir a partir de entonces.

En la vida de Crescencia no hubo nada extraordinario, todo lo hizo con sencillez y amor a Dios, y eso fue lo grande de su vida.Tuvo gracias muy particulares en ese momento, incluso llega a captar el Cielo, ve la gloria que le espera y dice: “¿Quién soy yo para merecer esto siendo más pequeña que un gusano?”.

La Opinion de Pergamino

Vida y Obra de la Hermana María Crescencia Pérez

María Angélica Pérez (Hna. Crescencia), nació el 17 de agosto de 1897. Toda su familia se

trasladó a Pergamino cuando ella era muy chica, se dedicaron a las tareas rurales, dentro
de un clima de profunda Fe.
Sus estudios primarios los cursó el el Hogar de Jesús, de Pergamino. También allí se recibió
de maestra de lae 1915 cuando ingresó al Noviciado de las Hermanas del Huerto, en Bs.As.
Su vocación religiosa tomó un curso definitivo un 31 de diciembre de de 1915 cuando
ingresó al Noviciado de las Hermanas del Huerto, en Buenos Aires.
Recibió el Santo Hábito el 2 de septiembre de 1916. Se entregó totalmente a Dios, como
hermana de la Caridad.
Los primeros años de su vida religiosa los dedicó a la niñez, se desempeñó como maestra
de labores y catequista, en un taller adjunto de la Casa Provincial, y luego en el Colegio
Rincón de Buenos Aires.
La segunda etapa de su vida la dedicó a los enfermos, comenzó esta misión en el Sanatorio
Marítimo de Mar del Plata. Lugar dedicado exclusivamente a la internación y atención de
niños con tuberculosis ósea, allí permaneció 3 años.Como su frágil salud empezó a declinar,
sus superiores decidieron enviarla a un lugar donde el clima la ayudase a recuperarse.
Eligieron para ello Vallenar, Chile.En el año 1928, la Hermana Crescencia visitó por última
vez Pergamino para despedirse de los suyos. Ante el progreso de su enfermedad, fue
internada durante 3 meses en un hospital cercano a Vallenar. Con verdadera piedad recibió
el Santo Viático, rodeada de su Superiora y Hermanas y mientras rezaban las oraciones de
los agonizantes, se incorporó e inclinándose delante del cuadro del Sagrado Corazón de
Jesús, repitió las Palabras que el mismo Jesús le enseñaba: "Corazón de Jesús, por los
sufrimientos de tu Divino Corazón, ten misericordia de nosotros".


Luego de pedir bendiciones para todas sus Hermanas, exclamó: "No me detengan más.
NO ME DETENGAN MAS...Sí, que todos vayan al Corazón Santísimo de Jesús, allí encontrarán
la salvación de su alma". Finalmente dijo sonriendo: "Padre...en tus manos encomiendo mi
espíritu". Así murió santamente, el 20 de mayo de 1932.






Tumba de la Hermana María Crescencia Pérez en la Capilla del Colegio.

Oración pidiendo la beatificación de la Sierva de Dios MARÍA CRESCENCIA PEREZ


 
Padre de Jesús y nuestro que por tu Divino Espíritu haces florecer la santidad en la Iglesia, te damos gracias por tu sierva María Crescencia que te amó con sencillez, y te rogamos que la glorifiques, para que su ejemplo e intercesión sirvan a la extensión de tu Reino y a la multiplicación de las vocaciones a la vida consagrada.
Concédenos, por su intermedio, la gracia que, con humildad, te imploramos.
Por Jesucristo Nuestro Señor, Amén.
  (Formular la petición y rezar un Padre Nuestro, Ave María y Gloria).
"Corazón de Jesús, por los sufrimientos de tu Divino Corazón, ten misericordia de nosotros".